El proyecto espera replicarse en otras dependencias de la universidad, según manifestó Luis Fernando Munera, vicedecano académico de la Facultad de Arquitectura, durante la inauguración de la plataforma de madera. La necesidad de espacios destinados al descanso y el bienestar de la comunidad universitaria motivó a estudiantes y profesores de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín, en colaboración con aliados externos, a desarrollar el Workshop: Taller con comunidades. Esta iniciativa, que nació en las aulas, se convirtió en un proyecto de sede y fue inaugurada el 27 de noviembre entre los bloques 24 y 25 del campus El Volador. La estructura de madera, ahora disponible, ofrece un lugar para quienes buscan descansar de las intensas jornadas académicas. Este workshop es una iniciativa interdisciplinaria coordinada por Jaime Sarmiento Ocampo, director de la Escuela de Arquitectura, y Luis Fernando Múnera, vicedecano académico y Juan Enrique Torres Madrigal, vicedecano de Investigación y Extensión . En el taller participaron estudiantes de los tres programas de pregrado y semilleros de investigación adscritos a la Facultad, así como estudiantes de otras facultades. El proyecto contó con el apoyo de la Sede Medellín de la UNAL, Rothoblaas e ICETEX, y el asesoramiento de Al Borde, la firma de arquitectura ecuatoriana fundada en 2007 por Pascual Gangotena, David Barragán, Marialuisa Borja y Esteban Benavides, quienes guiaron el proceso de diseño y construcción de la plataforma de descanso. La gestión de recursos con otras dependencias de la universidad, y avanzar en el proyecto en un tiempo determinado, fue una experiencia enriquecedora que dejó valiosas enseñanzas tanto para docentes como para estudiantes, y que servirá como base para futuras iniciativas similares. "Al Borde nos trazó una ruta clara; nuestro reto es aplicar esos aprendizajes en otros espacios dentro de la universidad", mencionó Luis Fernando Múnera durante la inauguración de la plataforma. "Nuestra vocación es transformar realidades", se refirió a la labor propia de los arquitectos relacionada con la búsqueda de soluciones a las necesidades presentes dentro y fuera de la universidad. Esteban Benavides, integrante del colectivo Al Borde, evaluó positivamente el trabajo realizado entre estudiantes y profesores de la Facultad. Sin embargo, señaló que uno de los desafíos más grandes fue fortalecer en los estudiantes la toma de decisiones y la comunicación en equipo, habilidades que, según él, podrían mejorarse aún más en futuros proyectos. El proceso de diseñar bocetos, compartir ideas con los compañeros, debatir, y eventualmente llegar a acuerdos, fue una experiencia vivida por Sebastián Ocampo, estudiante de arquitectura. Ocampo se enteró del workshop a través de una amiga y rápidamente se interesó en el proyecto. “Ha sido muy chévere compartir con los compañeros durante estos días de construcción. Da felicidad ver esto ya materializado”, expresó Ocampo al referirse a la plataforma de madera que se construyó. Por su parte, Eimy Hoyos, también estudiante de arquitectura, destacó el resultado obtenido, a pesar de las dificultades comunicativas que surgieron entre los estudiantes, Al Borde, la Facultad y otras dependencias involucradas en la consecución de materiales y el diseño de la estructura. "En todo proyecto siempre hay complicaciones, pero se deben manejar y solucionar de alguna manera", afirmó Hoyos, compartiendo la lección aprendida durante su participación en el Workshop: Taller con comunidades, que, como su nombre lo indica, fue un trabajo colectivo que convocó a toda la comunidad universitaria en un mismo interés: la construcción de un nuevo espacio para el bienestar de la comunidad. |