Vista en perspectiva, existe una semejanza entre las autobiografías y los archivos: ambos sistematizan las particularidades que definen la identidad de las personas. Diana Patricia Arboleda Carmona es bibliotecóloga egresada de la Universidad de Antioquia, especialista en Gestión Tecnológica del Instituto Tecnológico Metropolitano y Magíster en Archivística de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Medellín. Es madre de dos hijos, abuela, hija, hermana, amiga y compañera. Amante de la naturaleza, los animales, la fotografía, los libros, los viajes, el mar y los archivos históricos. Todas estas facetas son como piezas de un rompecabezas disperso que, juntas, conforman su vida.

Haciendo carrera profesional en la Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín

Muchos años antes de su llegada a la UnalMed, cuando Arboleda cursaba tercer semestre de Bibliotecología, inició a trabajar como monitora en la Sala Antioquia de la Biblioteca Carlos Gaviria Díaz de la Universidad de Antioquia. “Fue una bonita experiencia estar allí”, recuerda Arboleda. 

Este primer acercamiento a la Archivística, sería crucial para sus aspiraciones profesionales de hacer carrera profesional en una institución prestigiosa, acorde con sus intereses, como la Universidad Nacional de Colombia.

Antes de su paso por esta universidad, Arboleda trabajó en la Biblioteca del Colegio La Salle, por 2 años, en cierta ocasión, mientras revisaba la prensa, encontró el siguiente aviso: “Convocatoria pública abierta, Universidad Nacional de Colombia”.  

“Sentí que mi ciclo en el colegio terminaba, así que esta era una buena oportunidad, revisé los términos y me presenté al cargo de auxiliar de biblioteca, fue un proceso largo donde participamos aproximadamente 90 personas para dos cargos, tuve la fortuna de ser una de las ganadoras y desde el año 1997 pertenezco a esta hermosa institución”, manifestó Arboleda.

En su trayectoria profesional, se ha desempeñado en diferentes cargos dentro de la División de Bibliotecas y en segundo orden en la Escuela del Hábitat –CEHAP- de la Facultad de Arquitectura. 

Inició como auxiliar de biblioteca, ascendió al cargo de profesional universitaria, tras dedicado esfuerzo y estudio, también estuvo a cargo de la dirección de la biblioteca. 

El tiempo le ha enseñado a esta bibliotecóloga a ser dinámica en su adaptación a las funciones exigidas, gracias a esto ha logrado hacer carrera dentro de la universidad.

Su estancia en la Unidad de Documentación de la Escuela del Hábitat CEHAP

La primera vez que Arboleda trabajó en la Escuela del Hábitat fue como auxiliar administrativa en encargo, fue una experiencia enriquecedora que le enseñó habilidades sobre gestión administrativa que desconocía y que le sería útil más adelante, cuando regresó a la Biblioteca Efe Gómez e incluso en el presente, tras regresar a la Facultad de Arquitectura el año pasado.

En esta segunda oportunidad, está decidida a contribuir en la preservación, visibilización y difusión no solo del material bibliográfico y cartográfico sino también de los documentos inéditos que reposan en la Unidad de Documentación producto de los proyectos de extensión e investigaciones realizadas por los docentes de la Escuela del Hábitat – CEHAP-, los cuales además de valiosos por el contenido, son referentes de consulta recurrente entre los estudiantes de posgrado de la Facultad.

Su experiencia en la preservación de documentos e imágenes patrimoniales no es nueva. Durante su maestría en Archivística, Arboleda desarrolló un importante trabajo sobre la memoria arquitectónica y espacial de la Sede Medellín. La creación del Archivo Fotográfico de la Sede, una colección de imágenes tomadas por Hugo Mejía entre 1947 y 1949 que evidencian la transformación de la universidad a lo largo del tiempo, fue el producto final del proyecto, que se encuentra disponible en el micrositio web resultante del proyecto. Enlace del micrositio web: https://acortar.link/UGa8nr.

Es así como la vocación que nació de niña sigue intacta en ella, esa que la ha acompañado en este viaje por las bibliotecas, entre libros, archivos e imágenes, que tanto conocimiento han aportado a su formación en el pregrado, la especialización y la maestría.

“Aquí he crecido personal y laboralmente, he conocido personas maravillosas y al mismo tiempo he sido testigo de los cambios que ha tenido la institución durante los últimos veintiocho años”, concluyó Arboleda.