La Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín, es un importante escenario académico nacional que integra disciplinas, profesiones, saberes y campos interdisciplinarios –de carácter científico, tecnológico, artístico y humanístico– asociados al desarrollo del conocimiento, la creación y la intervención en conexión con la arquitectura, el diseño, el urbanismo, la construcción y las tecnologías arquitectónicas, las artes plásticas, la representación y las expresiones gráficas, el hábitat, el territorio, la planeación y el desarrollo urbano y regional. Un espacio donde la educación, la ciencia, la investigación y la cultura, se deben conjugar para brindar una excelente atención a sus públicos y construir conocimiento en procura de un desarrollo social sostenible para la Universidad, el país y la comunidad en general.

En consonancia, La Facultad de Arquitectura desde su Dirección de Bienestar y la Coordinación de Comunicaciones, definen articularse para promover una campaña de RESPETO que contribuya a una mejor prestación de los servicios que promueve; por la cantidad de usuarios que recibe diariamente, y por los tiempos que se mantiene activa durante cada jornada, demanda un clima de respeto por sus espacios, equipamiento y actividades, que favorezca el cumplimiento de su misión institucional, que garantice la comodidad de la comunidad académica, que constituya un mejor clima, y que estimule la sana convivencia.

Actualmente, en la Facultad se han evidenciado problemas de convivencia sobre los cuales se viene trabajando a nivel institucional, entre los cuales se destacan el ruido al interior de los bloques 24 y 25, los estudiantes juegan en los pasillos, hablan en voz alta, interfiriendo así con el desarrollo de las clases en las aulas y el trabajo en las oficinas.

Tampoco hay un cuidado y un respeto por los espacios. En las afueras del ingreso de la Sala U muchas personas se reúnen a la hora del almuerzo y dejan el espacio sucio con restos de alimentos, desde los antepechos arrojan basuras a la Sala U; no hay cuidado ni sentido de pertinencia por el mobiliario, los estudiantes no utilizan las mesas de corte para la realización de sus maquetas y dañan otros muebles que no están hechos para este trabajo, los baños de la Facultad se mantienen sucios o hacen mal uso de estos, así como del préstamo indebido del carnet, y además prevalece el consumo de cigarrillo al interior y en las afueras de los bloques 24 y 25.

Así, estas faltas a la convivencia y al buen comportamiento generan inconformidades de la comunidad académica, porque no se están poniendo en práctica los valores institucionales, ni las disposiciones de la Ley de la República de Colombia en lo referente al tabaquismo.

Bajo estas consignas la Dirección de Bienestar y la Oficina de Comunicaciones de la Facultad de Arquitectura proponen la campaña educativa "RESPETO", que llama a la comunidad académica a mejorar su actitud al interior de sus espacios, desde cinco frentes: el respeto por los espacios destinados a actividades académicas, el cuidado del mobiliario de las aulas, baños aseados y en buen uso y estado, el uso del carnet y la disminución del consumo de cigarrillo.

En un mundo en el que las diferencias nos dividen, es crucial promover el RESPETO dentro de nuestra comunidad. El respeto no es una mera palabra; es una poderosa herramienta que puede transformar las relaciones y crear un sentimiento de unidad entre las personas. Una campaña de respeto pretende fomentar la comprensión, la empatía y la aceptación entre los miembros de la comunidad académica, independientemente de sus orígenes o creencias. Anima a las personas a tratarse mutuamente con amabilidad y dignidad, creando un entorno armonioso e integrador en el que todos podamos prosperar.

El respeto es la base sobre la que se construyen comunidades fuertes. Cuando nos respetamos unos a otros, reconocemos el valor inherente de cada individuo. Significa reconocer que todos somos únicos y tenemos nuestras propias perspectivas y experiencias. Al aceptar la diversidad y mostrar respeto por los demás, creamos un espacio en el que todos nos sentiremos seguros para expresarse con autenticidad. Este sentimiento de pertenencia refuerza los lazos dentro de nuestra comunidad académica, permitiéndonos trabajar juntos hacia objetivos comunes.

Esta campaña pretende sensibilizar sobre la importancia de aceptar la diversidad y crear una sociedad integradora.

Además, una campaña de RESPETO no sólo beneficia a los individuos de nuestra comunidad, sino que también tiene un efecto dominó en la sociedad en su conjunto. Cuando nos respetamos unos a otros, inspiramos a otros a hacer lo mismo. Nuestras acciones se convierten en un catalizador para el cambio positivo, a medida que más personas adoptan un comportamiento respetuoso en sus interacciones con los demás. Esto crea una cultura de respeto que se extiende más allá de nuestra comunidad inmediata, extendiendo la amabilidad y la comprensión por y para todas y todos.